La mujer que más me amo

Cuando me puse a pensar en escribir esto quería narrar aquel sábado 23 de marzo del 2013 a detalle, pero aun lo recuerdo como si hubiera sido ayer, y sería volver abrir heridas que ya han cicatrizado no solamente para mi sino para todos aquellas personas que la conocieron y apreciaron en vida, escrito esto comenzare hablar de ella como la recordamos todos.

“Es obvio que la mujer que más me amo fue ella, porque cuando era pequeño y totalmente indefenso ella llego como una guerrera para salvarme, si ella tomo la decisión de traerme a este mundo sin importar las consecuencias pues lo importante era que yo viviera, desde siempre su amor estuvo presente conmigo y su familia, era estrictica pero tenía buen sentido del humor de manera frecuente, cuando ella no podía cuidarme me dejaba con su madre la mujer sabia y longeva de la casa, pero él también me cuido, bien recuerdo que me contaba historias de héroes y me inculco las melodías, podría decirse que estaba protegido por 3 guardianes en aquella casa que hoy en día sigue siendo mi fortaleza, agradezco que toda la familia me aprecia y me cuida como una legión de ángeles terrenales porque ella ya no está en la tierra, pero dejó como legado a dos mujeres guerreras que son mis hermanas y cuando veo su fortaleza asi como determinación para luchar sus propias batallas me inspiran a luchar las mías, pero he sido afortunado pues en mi cruzada he conocido a muchas amistades y alianzas, confieso que gran parte de mis mentores, maestros y líderes han sido mujeres.

Quizás nací con un cuerpo defectuoso provocado por una travesura genética, pero ella la guerrera que más me amo, me tuvo paciencia desde pequeño, vaya que la tuvo, pues siempre fui distraído en batalla que a lo largo de los años me provoco marcas de guerra, pero ella a lo largo de su vida entreno guerreras y guerreros jóvenes, yo fui testigo de sus entrenamientos, en ocasiones pedía permiso para enseñarme cosas que yo no aprendía rápidamente en mi entrenamiento, y porque los deberes familiares lo ameritaban, pues su familia siempre fue muy importante, eso siempre fue un rasgo que veía en ella.

Cuando era más joven pase por una época oscura, donde perdí la Fe propia y mi confianza andaba por los suelos, asi como mi autoestima, pero la guerrera incansable siempre oraba por mí, para que volviera a la luz de nuevo, cierto día un amigo valioso apareció para ayudarme enderezando mi rumbo, las plegarias de ella fueron escuchadas por el creador, poco a poco volví a brillar ayudando a los demás para encontrar mi propósito de vida, además de encontrarme con más amigos y amigas de verdad, fue una era de inspirar a otros pero ignoraba que también sería una época de preparación para la gran guerra que mi familia viviría tiempo después, contra aquella dama oscura que quita la vida, los primeros años tuvimos algunas bajas, incluida la mujer longeva que dejo este mundo con más de 100 años, mientras aquella guerrera me preparo sin yo saberlo para que lo pasaría después, incluso tuvimos tiempo para la boda de mi hermana mayor, pero luego de vivir un gran año paso algo que me marcaria para siempre, un día sábado por la mañana aquella guerrera que me salvo de pequeño caería en batalla, ese día hasta el viento lamentaba su ausencia, esa mañana nuestro perro guardián se quedó en silencio y olvidó su alimento, esa tarde mi tortuga intentaba abrazarme para aliviar mi dolor, amigos y familiares llegaron de todos los rincones para darnos abrazos, llegaron para darnos consuelo, llegaron para secarnos las lágrimas, pues la mujer que más me amo se iría a vivir a las estrellas, mi madre dejaría de ser una guerrera terrenal para convertirse en una guerrera en el cielo…y desde aquel lugar me cuida, me protege porque las batallas nunca terminan”.

Hoy después de 7 años, Analila mi mamá vive en mi corazón, vive en mi mente, pues los bonitos recuerdos no se olvidan, a veces mientras sueño ella y mi abuela materna aparecen en las historias de mi subconsciente al que llamo “dreamland” es gracioso pero la primera vez que la soñé recuerdo que nos regañaba a mi papá y a mí de camino a real de 14 con un atardecer como escenografía, en mis sueños su aura es de color morado siempre se manifiesta con ese color y yo siento mucha paz, es como si me cuidara hasta en mis sueños, sus recomendaciones quedaron tatuadas en mi mente, cuando ella vivía confieso que eran un fastidio pero al partir todas esas indicaciones tuvieron gran sentido, lo más cerca que he estado de ella luego de su partida fue una ocasión cuando la dama del frio me quería llevar, pues una hipotermia por poco me paraliza, mi madre y mi abuela querían hacer una reunión conmigo pero les comente que aún no era mi hora, después fui salvado por mis amigos en el bosque. 

A veces cuando manejo solo, la imagino como mi copiloto, por eso no meto la pata al conducir, y creo que la mantengo aún más viva que nunca, cuando platico mi testimonio de vida a la gente, donde obviamente cuento mis vivencias con ella, confieso que mi último vínculo con ella fue en mis sueños hace algunos meses, pero hace algunas semanas tuve una idea para que mi madre me volviera abrazar, descuiden no hice ningún pacto sobrenatural ni nada de eso, simplemente convertí una foto que tengo con ella en una cobija, que a su vez será como mi bandera y estandarte para decirle al mundo que el hijo de Analila nunca se rinde.